El ruido industrial generado por las maquinarias de las plantas en un problema dentro y fuera de la instalación. El ruido permanente dentro de una planta industrial es una situación nociva para los trabajadores. Pero además el problema se traslada a las afueras de las instalaciones. Este problema es especialmente notable en horarios nocturnos. Durante la noche el ruido exterior se reduce y el generado por las máquinas se hace protagonista.
El primer paso en la lucha contra el ruido industrial.
Antes de iniciar actuaciones, lo primero es localizar y dimensionar el problema. Os vamos a ilustrar este ejemplo con imágenes de una actuación sobre una planta del sector químico situada en el norte de España.
Como os hemos dicho, el primer paso ha consistido en realizar un estudio previo de las instalaciones. Para ello hemos utilizado un analizador de espectro y una cámara acústica que nos ha permitido identificar y localizar los focos que originan la fuente de ruido que afectan a la instalación. Una vez analizados los resultados y con las medidas adecuadas de las perturbaciones acústicas se diseñaron una serie de medidas correctivas para eliminar el problema. Además en este estudio se predijo la dimensión de la reducción que se podría conseguir aplicando dichas medidas.
Una solución efectiva.
La solución diseñada se compuso de cuatro encapsulados acústicos para las máquinas, y un total de diez silenciadores acústicos. Con estos silenciadores se consigue permitir el paso del aire, a la vez que se minimiza el ruido. En las imágenes se puede observar la situación inicial y la posterior tras aplicar las acciones correctivas.
Una vez acabada la instalación de los encapsulados y los silenciadores, se procedió a realizar una nueva medida del ruido presente en la planta. El objetivo de esta nueva medición es el de certificar los niveles de reducción de ruido. En el resultado final de las mediciones se certificó una reducción global de 10dB, y en algunos puntos hasta 15dB respecto a los valores medidos en un inicio.
Cumpliendo la normativa.
Esta reducción de ruido conseguida coincide con los niveles que se predijeron tras la realización del estudio previo. Esta disminución del ruido presente en la planta, permite cumplir con la normativa de ruido que afecta a sus trabajadores en el interior de la instalación. La normativa en concreto que afecta a estas plantas es el RD286/2006.
En el siguiente enlace podéis encontrar un resumen de este real decreto que explica los objetivos del mismo y cuándo es objeto de aplicación.
Además de cumplir con los niveles de ruido establecidos en la normativa, lo más importante son los resultados percibidos entre los trabajadores. El equipo de la empresa comentan la notable mejoría del ruido interior, siendo ahora mucho más agradable realizar su trabajo. Y otro punto muy importante es que los vecinos más próximos han dejado de oír el ruido en horario nocturno. En consecuencia la convivencia con el entorno de la planta se ha mejorado de forma palpable.
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ADIÓS RUIDO. HOLA TRANQUILIDAD.