En nuestro caso de hoy os mostramos el reemplazo de los silenciadores industriales dentro de una planta. Los silenciadores ya existían pero estaban algo deteriorados no cumpliendo su función de forma satisfactoria.
Situación inicial.
Nos encontramos en las instalaciones de una empresa industrial en el País Vasco. Esta planta se dedica a la producción de aceros largos especiales. Se trata de un importante proveedor líder en el sector de productos de calibrado.
La planta disponía de una serie de silenciadores operando de forma inadecuada. El proceso productivo de la planta y el mantenimiento al que se sometió estos dispositivos llegó a una eficacia prácticamente nula de los equipos.
En consecuencia se plantea el reemplazo de los silenciadores que estaban trabajando de forma ineficaz. Los equipos generaban niveles de ruido de alrededor de los 85 dB. Estas medidas superaban los límites permitidos por el Real Decreto 286/2006, de 10 de marzo. Esta normativa regula la protección de la salud y la seguridad de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición al ruido, en una zona de tránsito habitual de trabajadores.
La solución al problema.
El encargo fue diseñar unos silenciadores para reemplazar los existentes. Los parámetros del trabajo eran claros, permitir de forma fácil el mantenimiento y la limpieza de forma periódica. El objetivo era evitar un deterioro rápido y por lo tanto alargar la eficacia de los equipos en el tiempo.
La solución fue el diseño de una serie de silenciadores modulares. Estos disponen de una superficie de rápido desmontaje para permitir acceder al interior. De esta forma y mediante unos railes se puede acceder a los bafles fonoabsorbentes y facilitar su intercambio. Este sistema facilita las labores de mantenimiento y permite la sustitución de elementos susceptibles de dañarse a lo largo del tiempo.
Todo el reemplazo de los silenciadores fue una actuación coordinada con la producción de la planta. El trabajo en equipo permitió la sustitución de cada silenciador en fechas establecidas de manera que no afectase a la producción. Cada sustitución de cada silenciador se realizó en días diferentes.
Cumpliendo la normativa.
Tras la sustitución de los elementos se realizaron una serie de mediciones de comprobación. Estas mediciones marcaron niveles de atenuación de 12 a 18 dB. En todo momento se obtuvieron resultados inferiores a 75 dB(A), cumpliendo con los objetivos de calidad requeridos por el cliente.
En las imágenes del artículo podemos ver la situación original de la planta y como quedó tras el reemplazo de los silenciadores. También podemos ver bajo estas líneas un croquis para poder observar adecuadamente los bafles registrables.
Si quieres saber más sobre silenciadores industriales, pregúntanos AQUÍ MISMO.